Dolo. Somos la herencia
“Dolo” es un álbum en el que suenan tres grupos diferentes. Por un lado, están temas como “Un nuevo idioma”, “Pesar” o “Parque de Atenas” y, en seguida se haría una imagen mental muy concreta. Esa que lleva a Décima Víctima o incluso a Joy Division. Por otro lado, si escuchamos “Kolima” o “Injusto”, nos encontramos ante un grupo completamente distinto. Sí, también oscuro y denso, pero otra banda. Ahí vemos un trabajo de programaciones y sintetizadores que les lleva por otros derroteros y dónde desaparece el concepto de canción de estrofa y estribillo.
Y hay una tercera vía que son las dos últimas canciones del álbum, “Cuero Rojo” y “Entre las piedras”, que es donde consiguen aunar lo mejor de los dos mundos (el de las canciones “siniestras” y el de las tímbricas Arca) y así resolver la dicotomía. Tesis, antítesis, síntesis. Y ahí, en esos dos temas logran no quedarse en mera derivación de un sonido ya muy transitado o adentrarse en aventuras sonoras interesantes, pero poco concretas. “Cuero rojo” y “Entre las piernas” les convierte en un grupo con un sonido propio y único.
A diferencia de otras bandas que arrancan con lo mejor de su repertorio al principio del álbum, en este caso, es justo al final donde alcanzan la cúspide. Las últimas serán las primeras.